El Seremi de Vivienda y Urbanismo, Aldo Ramaciotti, encabezó actividad para dar inicio a la fase I del Programa Quiero Mi Barrio, junto a representantes locales y a los vecinos y vecinas del barrio Oreste Plath de la comuna de Cerrillos.
En la ocasión se realizó un recorrido por el barrio en cuatro puntos de parada, donde los vecinos presentaron sus necesidades y problemáticas actuales a las autoridades presentes, con el fin de conseguir mejoras sustanciales en el barrio; cambio que se logrará en parte, con la llegada del programa.
“Hoy nos reunimos todos en terreno conociendo y debatiendo, y es precisamente este ejercicio el espíritu del Programa. Nadie se debe sentir excluido ya que todos están invitados a participar sin miedo y en libertad de expresión. Lo que busca el programa es fortalecer las organizaciones sociales en los distintos puntos de intervención, y por tanto, es fundamental conocer las necesidades y problemáticas de la comunidad, así como los aspectos positivos de los vecinos y vecinas que serán conformados por el Consejo Vecinal de Desarrollo”, señaló el Seremi de Vivienda y Urbanismo, Aldo Ramaciotti.
En este mismo sentido, el Seremi destacó la activa participación que ha tenido la municipalidad de Cerrillos, al postular este emblemático barrio que fue seleccionado dentro de las demás demandas existentes dentro de la Región y a la disposición para sacar adelante cada uno de los proyectos que se encuentra trabajando en conjunto con la Seremi de Vivienda y Urbanismo.
Por su parte, el dirigente vecinal del Barrio Oreste Plath, Roberto Rojas, agradeció la visita realizada por las autoridades y por la posibilidad de cambiarle la cara a su barrio. “Gracias a cada una de las personas que están aportando en conseguir mejoras para nuestro barrios y agradecer muy especialmente a los chicos del programa Quiero mi barrio, que se encuentran apoyándonos en esta importante transformación que realizaremos no tanto para nosotros, sino para las generaciones que vienen”.
La estrategia de intervención del programa está estructurada en dos componentes: uno físico y otro social. El componente físico hace referencia a obras de mejoramiento del espacio público y a la construcción de equipamiento. El componente social abarca un completo proceso de participación que se inicia con la elección del Comité Vecinal de Desarrollo que definirá el programa de intervención recogido en el Contrato de Barrio. Este documento contempla además de las obras, programas de empleo y micro-emprendimientos, medioambientales, de prevención de drogadicción y alcoholismo, de integración de la mujer, actividades culturales y de identidad, y seguridad ciudadana.
En este barrio en particular existen problemas fundamentalmente de acumulación de basura en los espacios públicos, iluminación, falta de pavimentación en copropiedad y la presencia de un vertedero en pozos de extracción de ripios, lo que fue informado a las autoridades respectivas para lograr un cambio sustancial en el barrio y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
Actualmente el programa trabaja día a día para que los vecinos y vecinas logren reconocer su barrio, respetarlo y promover su diversidad social y cultural. Para ello, los coordinadores a cargo del programa en los distintos barrios seleccionados, generan las instancias ideales para promover una buena convivencia que favorezca la vida en el barrio y proyecte una visión positiva de su propia identidad socio-cultural.
Según el Programa Quiero Mi Barrio, de los 55 barrios seleccionados, existen 50 en ejecución, es decir, más del 90 por ciento está en pleno proceso constructivo para mejorar la calidad de vida de los habitantes de un barrio.