Sin duda que es de vital importancia preparar a las Instituciones públicas frente a un desastre provocado por la naturaleza. Nuestro país reúne características geográficas que lo hacen estar en constante alerta con respecto a terremotos, tsunamis, incendios, aluviones, inundaciones y erupciones volcánicas; todo esto implica estar preparados para el accionar ante estos temas generando una eventual respuesta de manera oportuna y precisa en beneficio de los habitantes de nuestra Región.

Para tal efecto, se han tomado diferentes medidas, estrategias y acciones, que permiten planificar y evitar la reducción de estos desastres, riesgos y sus efectos para los habitantes de la Región Metropolitana.

En la misma línea, el Seremi de Vivienda y Urbanismo de la Región Metropolitana, Boris Golppi, comenta que “nuestro país es muy complejo en esta materia, por tanto, las instituciones públicas debemos estar bien coordinadas y planificadas para abordar de manera coordinada, algún desastre natural”.

“Hoy estamos acá reunidos para capacitar a los funcionarios públicos y a las contrapartes municipales de nuestra Región, cumpliendo con el compromiso de aportar con nuestro accionar y entregar nuestros conocimientos a lo largo de nuestras investigaciones para permitir una visión más amplia y directa de cómo debemos actuar frente a estos eventos tan lamentables a la hora de provocarse un desastre”, enfatizó el Seremi.

En ese contexto, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo ha realizado un esfuerzo por incorporar en su quehacer los lineamientos y compromisos derivados del Marco de Sendai, los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el Acuerdo de París, la Nueva Agenda Urbana y la actual Política Nacional para la Gestión de Riesgo de Desastres, que convergen en priorizar la reducción de riesgo de desastres y fortalecer la resiliencia.

Por su parte el Director de Serviu Metropolitano, César Faúndez, indica que las instituciones públicas deben estar preparadas y coordinadas y a la altura de lo que nuestro país demanda en esta materia. “En lo personal me tocó el tema del terremoto del 2010, en la misma contingencia siendo voluntario en la zona cero, y luego, me tocó ser coordinador de reconstrucción de Serviu en la región del BioBio, por lo tanto, es una materia que para muchos de nosotros es conocida, pero debemos aprender a cómo debemos planificar, programar y coordinar, de modo de llegar el momento, los protocolos se activen y trabajemos coordinadamente”.

El ciclo de manejo de la reducción del riesgo de desastres tiene 4 fases: Prevención, Preparación, Respuesta y Reconstrucción. Un evento destructivo ocurre entre la Preparación y la fase de Respuesta. Las tres fases de gestión de riesgo de desastres, que están a cargo de la Comisión Asesora, vale decir, el 75% del ciclo de Gestión del Riesgo de Desastres son la Prevención, la Preparación y la Reconstrucción. La Respuesta luego del evento es de responsabilidad de la División Técnica (DITEC) del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.

A la Comisión Asesora para la Reducción de Riesgo de Desastres y Reconstrucción le corresponde, además de colaborar en el diseño de un sistema de monitoreo de los proyectos asociados a los Planes de Reconstrucción vigentes, prestar asesoría en la elaboración de una estrategia institucional para la reducción de riesgo de desastres que considere acciones en las fases de prevención, preparación, respuesta y recuperación frente a desastres, enmarcados en la Política Nacional del tratamiento del tema.

La idea de la iniciativa es, entre otras, trabajar en nuestra región, analizar y diagnosticar posibles zonas de riesgos que estén expuestas a algún desastre natural como los volcanes, aluviones, forestación, zonas inundables, entre otros. Por último, esta Comisión pretende plasmar en los decretos que rigen al MINVU, inversiones que reduzcan el riesgo de desastres.

La Arquitecta de la División Técnica del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, (DITEC) Claudia Galaz, señala que es muy importante saber lo que debemos hacer y también lo que no debemos hacer frente a un fenómeno de la naturaleza. “Como Ministerio hemos aprendido cuál es nuestro rol, y cómo debemos operar, y nos hemos capacitado para poder entregar nuestro conocimiento a nivel nacional, con el propósito de generar una respuesta oportuna que ayude a disminuir el daño provocado por un desastre”.

La palabra Desastre se compone de dos partes, “des” y “astre”, que corresponde al concepto de dificultad con los astros, por lo tanto, antiguamente el hombre originario pensaba que los planetas se alineaban de forma negativa. “Desastre era algo relacionado con el enojo de los dioses, y se convertía en un fenómeno sobrenatural, a medida que fue avanzado el desarrollo tecnológico y el ser humano se dio cuenta que existían eventos que, si se podían predecir y prepararnos para responder”, explica Claudia Galaz.

Por tanto, es urgente fortalecer la capacidad institucional regional de respuesta, para lo cual se genera la difusión y sociabilizar el PRO-Regional a los funcionarios del servicio, así como capacitar a los equipos técnicos y sociales; además de desarrollar un protocolo que facilite la disponibilidad de recursos para actuar, de acuerdo a lo que el Presidente Sebastián Piñera indicó a nuestro Ministerio de la Vivienda y Urbanismo, por tener una injerencia mayor frente a un fenómeno de la naturaleza.

La contraparte técnica de la Seremi RM, el Arquitecto, Rodrigo Sánchez, señala como conclusión que “a nivel municipal la capacitación fue todo un éxito, la convocatoria estuvo muy buena y el interés mostrado por los funcionarios, ya que es un tema nuevo y desconocido, y arrojó una dificultad que debemos trabajarla más y que tiene que ver con la coordinación que tenemos con Serviu. La capacitación con los funcionarios se cumplió, y se abre, además, la posibilidad para seguir el próximo año con otra capacitación para las municipalidades de gestión de desastre”.

El desafío principal que enfrenta el PRO Regional para el próximo año, es lograr la capacitación de todos los funcionarios de la Seremi de Vivienda y Urbanismo y que la gestión de Riesgos de Desastres sea un tema de nuestro quehacer institucional, y no sólo que se resuene para las emergencias, ya que, el estar preparados nos beneficia a todos.