Desde 2013 y a raíz de una consulta vecinal, la Seremi de Vivienda y Urbanismo de la Región Metropolitana recogió la inquietud de los vecinos de Villa Diego Portales, de mejorar los diversos espacios interiores del barrio.

Este proceso de diseño participativo se basó en una metodología llamada cartografía social, donde los vecinos definieron el lugar dónde poner cada elemento, escuchando la opinión técnica de los profesionales de la Seremi, del Serviu o de la municipalidad, pero éstos a su vez, atendiendo y aprendiendo de los habitantes, ese saber que tienen, ya que en definitiva son los que utilizan y experimentan ese territorio día a día.

“Los vecinos tienen incorporado un saber del habitante. Los proyectistas muchas veces nos ponemos a diseñar en el tablero, en el computador, sin tomar las experiencias de los residentes. Pero en este caso, fueron los vecinos los que definieron que el proyecto continuara haciendo plazuelas, luego nos acompañaron a diseñar en estos talleres, in situ, lo que nos permitió enriquecer los proyectos de arquitectura y ahora nos están acompañando en el desarrollo de la obra. De alguna manera los vecinos han ido madurando con nosotros lo que quieren. Y se ha generado un proceso de acompañamiento muy positivo, ya que ha sido una escucha activa permanente, que es muy positiva, ya que va retroalimentando el trabajo”, nos comenta David Herrera, arquitecto y coordinador de la Seremi de Vivienda en la Villa Portales.

Presenciamos el estado de avance de 70% de la plazuela Los Plátanos, la que contó con la asistencia –además, de la paisajista y el proyectista de Serviu, definiendo junto a las vecinas, la poda o el retiro de algunos árboles, así como inspeccionando el comportamiento de la evacuación de las aguas lluvias y del colector recién instalado, de uno de los pasajes.

“Todo esto se inundaba y era imposible caminar. Llovió hace poco y mire, está casi seco. Antes no se podía caminar por acá”, comenta una de las vecinas, mientras los representantes de las instituciones observan el comportamiento del colector de aguas lluvias y deciden pavimentar la franja de tierra, para evitar daños futuros.

“Los vecinos de la villa son muy activos en ir cotejando los cambios que se van definiendo en conjunto, exigiendo respuestas y anotando fechas de ejecución, pero también son defensores del proyecto convenido y acordado, cuando se suman a estas instancias, otros vecinos que por razones diversas no participaron de las reuniones donde se definió el plan de recuperación del sector”, concluye el profesional de la Seremi.