Poder constatar en terreno los avances concretos de las comunidades, tanto en las obras como en lo social, recibir los testimonios de aprendizaje y crecimiento de parte de los vecinos y darles la bienvenida a nuevas iniciativas autogestionadas por la comunidad, son los mayores logros del Programa Quiero mi Barrio, que lo convierten en una exitosa política pública que ya lleva doce años en ejecución.

Desde el punto de vista cuantitativo, se trata también de un Programa exitoso. El 2018 comenzó con 48 barrios en ejecución y, gracias al trabajo en equipo de sus profesionales y al esfuerzo de los municipios y vecinos involucrados en el proceso de mejoramiento de las comunidades, logró terminar el año cerrando veinte contratos de barrio, lo que implicó, además, cumplir a cabalidad y sin mayores dificultades las metas que se habían impuesto.

La ejecución de los Planes de Gestión Social y de Obras en estos veinte barrios de la región metropolitana implicó una inversión de más de catorce mil millones de pesos.

Al respecto, la Secretaria Técnica Regional del Programa de Recuperación de Barrios, Heidi Kraemer, afirmó que “todos los logros del año recién pasado son el resultado de un arduo trabajo en equipo, de los profesionales del Quiero mi Barrio de la Seremi y del Serviu, pero también de los otros departamentos que componen nuestra Secretaría Regional; sin el apoyo de cada uno de ellos, sería imposible llevar adelante el Programa y poder cumplir nuestros objetivos en las comunidades”.

Kraemer, destacó que “los buenos resultados que cosechamos hoy responden a una planificación regional estratégica que se ha venido perfeccionando desde que el Programa es concursable, y a la que continuaremos nutriendo con la experiencia que, año a año, vamos ganando en conjunto con las comunidades y los municipios de la región”.

Nemcia Echeverría, presidenta del Consejo Vecinal de Desarrollo del Barrio Santa Raquel de La Florida, uno de los vecindarios que terminó el ciclo del PQMB en 2018, señaló que “fue una experiencia excelente”, y que gracias a la construcción de áreas verdes “la gente disfruta de las plazas; los niños, la gente adulta, ahora todos salen, durante todo el día hay movimiento en la plaza, los niños se bañan, es algo muy bonito”.

La dirigenta relató que, en un comienzo “la gente estaba incrédula, no creían que se iba a lograr algo tan hermoso, una mejor calidad de vida, pero después en las reuniones se fueron empoderando y trabajaban con el Quiero mi Barrio, haciendo el diseño de cómo querían que fuera el barrio”.

Este 2019, el Programa seguirá trabajando en los barrios que permanecen con contrato abierto, pero, además, enfrentará nuevos desafíos con la incorporación de los 16 nuevos barrios que acaban de ser seleccionados por concurso, y se implementarán nuevas metodologías las que asegurarán que los proyectos nuevos del Programa Quiero mi Barrio cuenten, a partir de este año, con la recomendación favorable entregada por el Ministerio de Desarrollo Social en dos etapas de la intervención.

Este sistema de recomendación se usa en todos los proyectos, programas o iniciativas financiadas por el Estado a través del Sistema Nacional de Inversiones, modernizando el trabajo a realizar.

Desde su inicio en 2006, el Programa Quiero mi Barrio ha intervenido en 163 comunidades en la Región Metropolitana, transformando el espacio urbano y fortaleciendo a sus habitantes con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los vecinos y potenciar la relación, y colaboración, con los gobiernos locales.