La ley de Copropiedad N° 19.537 del año 1997, es una herramienta de utilidad para las familias que habitan en Condominios, la cual permite regular las necesidades actuales de la vida en comunidad respecto a sus derechos y deberes en espacios comunes y privados y de convivencia diaria. Esta Ley ha experimentado modificaciones para adaptarse a las necesidades que surgen desde la interacción permanente de las personas.

Para tal efecto, existen mecanismos organizacionales que permiten cumplir la ley, en el cual los condominios sociales deben tener un comité de administración, conformar asambleas ordinarias y extraordinarias y, por último, contar con un Administrador, que es una persona externa al Comité de Administración, y cumple la función de citar a asambleas, recaudar los gastos comunes del edificio, dar cuenta de sus diligencias, dirigir las asambleas, y todo acto concerniente a la administración del condominio. Cuando un condominio no tiene Administrador, es el Presidente del Comité quien asume estas funciones, sin derecho a remuneración.

De acuerdo a lo anterior, todos los condominios pueden hacer uso de las herramientas que entrega la ley para organizarse y adquirir una forma que les permita vivir en un espacio de convivencia donde coexisten bienes que son de todos y bienes que son de cada propietario.

Según la Asistente Social del equipo de Vivienda Colectiva de la Seremi de Vivienda y Urbanismo, Nadia González “la participación es uno de los elementos de mayor importancia para lograr los objetivos que la comunidad se ha propuesto para su desarrollo. Si soñamos alguna vez con un barrio tranquilo, donde nuestros niños puedan jugar libremente, el trabajar en conjunto es clave para lograr su éxito”.

 “En un condominio cada uno es dueño de su departamento, pero además hay bienes comunes, como los pasillos, las áreas verdes, las techumbres, en los cuales bien, al interior del conjunto habitacional, etc.), todos los copropietarios somos dueños de esos bienes comunes. Aunque no sea propietario y por ejemplo si es arrendatario, también es importante que respete lo establecido en el reglamento de copropiedad. Las normas son para todos y todas”, indica la profesional.

Para el Seremi de Vivienda y Urbanismo de la Región Metropolitana, Manuel José Errázuriz, “el reglamento de copropiedad es fundamental para regular la convivencia entre los vecinos y es muy necesario mantenerlo para lograr tener una buena convivencia, más que cumplir un requisito formal, donde está registrado en el Conservador de Bienes Raíces, es reiterar la importancia que tiene la organización entre los propios vecinos”.

Respecto a la nueva ley de Copropiedad señala, “desde el 2017 se comenzó a trabajar, y partió como un trabajo del Minvu con los Senadores de la Comisión de Vivienda y es un proyecto donde se recopiló mucha información y con un estudio previo. Actualmente, se encuentra aprobado en el Senado y estaría faltando la aprobación en la cámara de Diputados y probablemente un tercer trámite, para lograr que exista más regulación frente las normativas actuales de Copropiedad”, puntualiza la autoridad regional.

Modificaciones a la Ley de Copropiedad Inmobiliaria

La nueva Ley de Copropiedad Inmobiliaria, permitirá a todas las familias que viven en conjuntos habitacionales estar informados respecto al reglamento de copropiedad que los regula; las obligaciones económicas de los propietarios; los planes de emergencias; las fórmulas para resolución de conflictos; exigencias urbanas y de construcción, entre otros temas, que en esta nueva Ley regula para mejorar la calidad de vida en sus comunidades.

También, la nueva Ley de Copropiedad, contempla, la modernización de los protocolos de emergencia, la creación de un registro nacional de administradores y la posibilidad del Minvu de imponer instructivos mediante circulares. Esto nos permite tener una mayor seguridad y compromiso con las familias que viven en copropiedades reglamentando de mejor manera normas que no estaban legalizadas.

Las modificaciones que incluye el proyecto de ley facilita la tenencia de mascotas y animales de compañía e incorpora la celebración de convenios de pago con residentes morosos de gastos comunes, de manera tal de buscar alternativas para el pago y que no se deba incurrir en cortes de servicios básicos. Asimismo, se ajusta a los tiempos actuales y permite la utilización de recursos digitales por sobre la necesidad presencial del residente.

Otras modificaciones que tendrá esta nueva Ley, permite que antes de vender o transferir una vivienda, se deberá declarar que ésta no tiene deudas del condominio.  Los miembros del Comité de Administración podrán acceder a descuentos en los gastos comunes. A su vez, se crea el Registro Nacional de Administradores de Condominios, requisito para ejercer esa actividad, y, por último, se controlará los actos discriminatorios, para que se sancione a quienes están alentando este tipo de acciones.